Hace apenas un año me encontraba reseñando el noveno trabajo de los veteranos del Death Metal, Autopsy. Nunca imaginé volver a toparme con una nueva placa de ellos en tan poco tiempo, pero acá estamos. (Dejamos aquí el link a dicha reseña: https://darknessnews.com/autopsy-morbidity-triumphant/).
La formación se mantiene, la onda también, el artista de la portada sigue siendo Wes Benscoter, y ciertamente me agrada. Muchas portadas del estadounidense me parecen geniales, como por ejemplo las últimas de Bloodbath y Hooded Menace (también reseñados en el sitio), Phantom Antichrist de Kreator, tal vez la mejor de los alemanes en todo este milenio; algunas de Mortician, Sinister, o la inolvidable Divine Intervention de Slayer. Sus colores sin dudas nos llaman a conseguir el formato físico. Pero vamos a enfocarnos un poco en la música. Claro está que, si hablamos de los orígenes del género en Estados Unidos, Autopsy merecen ser tenidos en cuenta por más que muchas veces se los olvide. Inclusive podemos decir que es una de las agrupaciones que se han mantenido más apegadas al sonido original a lo largo de los años.
Algunas personas le adjudican un valor especial a gran parte de su discografía por mantenerse en la línea, mientras que para otras puede volverse algo monótono o predecible. Yo me encuentro en el medio. Llegué a disfrutar muchísimo su trabajo anterior, ya que habían logrado sonar sucio y manteniendo su etiqueta, pero a la vez creando composiciones bastante entretenidas. En este caso notaremos que el audio se encuentra levemente más pulido, siendo el bajista Greg Wilkinson uno de los responsables. También podemos decir que el bajo se encuentra bastante presente y trabaja muy bien en conjunto con las guitarras. El final del tema que abre la placa, “Rabid Funeral” sirve de claro ejemplo. Una canción cargada de Death Metal directo al hueso que baja a las catacumbas lentamente. Allí nos atacan con “Throatsaw” (sierra de garganta), donde los gritos salpican sangre y las guitarras cortan como serruchos.
Piezas como “No Mortal Left Alive” o “Bones to the Wolves” mixturan muy bien la parte más doombeta del cuarteto con las bases más directas y punketas. Mientras que “Well of Entrails” se arrastra durante dos minutos desde la húmeda oscuridad hasta el erguimiento más violento que Autopsy pueda acostumbrar a mostrarnos. Skank beats, solos asesinos y bases a tremolo picking dejan lugar a un poquito del sonido más rockero en “Ashes, Organs, Blood and Crypts” y “Marrow Fiend”, pero no será por mucho tiempo… Sabemos que lo único que pretenden es arrancarnos las vísceras como el muerto viviente de la portada, y manducarnos hasta el hueso. Luego de algunas partes cuasi Maidenosas y tremendos detalles aportados por el bajo, harán un poco más de hincapié en su veta más rockera con “Toxic Death Fuk”; siendo esta una de las piezas más cortas y aún así más entretenidas del trabajo (a mi gusto). Directa, sencilla y pegadiza; dejándonos un poco manija para volver a escupirnos su mix Death/Doom en “Lobotomizing Gods” y “Death Is the Answer”, uno con sentimiento asfixiante al principio y final extremo, mientras que el otro se manifiesta a la inversa. Así llegamos al desenlace con “Coagulation”, el cuál mixtura un poco todo el proceso de muerte expuesto en esta nueva entrega de los californianos.
La voz del viejo compañero de Chuck Schuldiner, el señor Chris Reifert, sigue siendo tan característica e interesante como siempre. Se sigue olfateando tan fétida y gorgoteante, como agresiva y lacerante. Su trabajo como baterista también se encuentra en un buen nivel. El bajo de Greg es un factor clave en las composiciones, mientras que las guitarras de Danny Coralles y Eric Cutler se mantienen con la efectividad justa, con este último haciendo un buen aporte también desde algunas voces.
Más arriba escribía algún detalle sobre su trabajo anterior, y tal vez haya sido el causal de que esta nueva entrega, a pesar de haberme gustado bastante, no me haya sorprendido tanto. Tendría que culpar al audio por esto, y también aclarar que esta nueva entrega técnicamente suena mejor. Pero a mi gusto, cuando Autopsy suena más crudo, suena aún más real. Creo que han vuelto a entregarnos un trabajo muy digo, sería estúpido no reconocer eso, pero sinceramente prefiero el anterior.