Lair Of The Minotaur – Canciones directas y efectivas directas al mentón

¡Amigas! ¡Amigos! Bienvenidos una vez más a este maremágnum de palabras, con las que intentaré describir las distintas sensaciones causadas por distintas bandas en mi persona, en esta sección que hemos dado en llamar “Escrito Sagrado”.

Los invitados de hoy, Lair Of The Minotaur.

Este grupo de inquietos muchachos de los que hoy voy a desparramar palabras los conocí por una fortuita casualidad. Estaba sonando de fondo en el local de venta de Cds que solía frecuentar, en la zona de San Martín. Ese sonido mugrientamente agresivo que salía de los parlantes me llamo la atención, tanto que ese mismo día me lleve una copia del cd que unos párrafos más adelante describiré en detalle.

Pero primero lo primero, dijo un sabio que nunca nadie escucho. Lair Of The Minotaur se forma en el 2003, de un desprendimiento de miembros de “7000 Dying Rats”, una formación orientada hacía un grindcore, con temas extremadamente cortos. Steven Rathbone, Guitarra y Voz, D. J. Barraca, Bajo, y el ex Pelican Larry Herweg, Batería, le daban forma a esta hermosa abominación  musical. Meses más tarde editarían su primera producción, “Carnage” – 2004, con un sonido sucio, desprolijo y de escasa producción, pero no por eso no deja de ser una muy buena edición. Con canciones directas y efectivas que van derecho al mentón.

Destaco temas como “Carnage Fucking Carnage”, “Enemy Of Gods” (que es mi canción favorita de este disco, con sus acoples y su ritmo ultra pesado), también “The Wolf”, “Warlord”, (una bomba!), convirtiéndose este álbum en un muy buen disco debut.

Luego aparece “The Ultimate Destroyer” – 2006, es el siguiente nauseabundo y firme paso del Minotauro. Con mejor producción y una clara mejora compositiva, nos regalan un gran disco de un pesadísimo Thrash/Sludge Metal. Ya afianzados en lo que buscaban, el disco es un mazazo tras otro, sin ningún tipo de misericordia. Así se destacan los siguiente temas, “Juggernaut Of Metal”, (excelente comienzo), “The Ultimate Destroyer”, (un temazo!), “Cannibal Massacre”, “Lord Of Butchery”, (un bombazo de cincuenta y tres segundos!), “Engorged With Unborn Gore”, “The Hydra Coils Upon This Wicked Mountain”, no solo es el título más largo del disco, sino también el de más duración.  Pesadísimo y con un final digno de este Minotauro demente.

El siguiente paso de esta gran banda es el disco con el que los conocí, y por el que apoye mis sentaderas en esta confortable silla. Estoy hablando de “War Metal Battle Master” – 2008, que con un acople de guitarra nos da la bienvenida a esta demencia de casi cuarenta minutos de arrolladora violencia. Se suma la batería de manera frenética y la masacre está en marcha. “Horde Of Undead Vengeance” avanza a paso firme, con su mezcla de Thrash / Death que no hace más que desplazarnos la cervical de lugar. Arrollador comienzo, que aparte de la obvia pesadez que ya le conocemos al Minotauro, vienen unos muy lindos arreglos de guitarra.

El tema que continúa es el intensísimo “War Metal Battle Master”, tras su furibundo arranque, a mitad de tema llega un rebaje bien Heavy que tras el corte a cargo del bajo y la batería, nos vuelven a meter en el medio del campo de batalla. Otro tema que no da respiro ni muestra misericordia. Lo que si muestra es un video, entre gore y bizarro, con unos escasos guerreros batallando hasta que hacen su aparición unas caníbales que comienzan a hacerse un festín con los muertos en batalla, ante la mal actuada mirada del protagonista del video. Búsquenlo.

El siguiente paso es “When The Ice Giants Slayed All”, con un comienzo a doble bombo bien furioso, que baja un cambio para darle entrada a unas guiitarras a lo “Slayer” muy bien logradas. Luego baja un poco la intensidad sin quitarle nada de violencia. Un muy buen tema.

Con “Slaughter The Bestial Legion”, llegamos a la mitad del disco. Un tema bien pesado, más intenso que rápido. La guitarra va machaqueando y nosotros a la par cabeceando. La parte del medio es muy buena. Uno de mis preferidos de este discazo es “Black Viper Barbarian Clan”, que desde su comienzo marca que se viene la masacre. Un muy buen riff marca el camino y la batería la intensidad. Pasando los dos minutos mandan un rebaje asesino, que nos sumerge en una ciénaga mugrienta que nos va llevando hacía el final.

“Assassins Of The Cursed M;ist”, para mí es el mejor tema del disco. Con un riff abierto, nos sumerge en algo parecido a un Death & Roll muy, muy bueno y pegajoso, con el que no podemos dejar de cabecear. Con varios cortes y arreglos el tema lejos de ser monótono, se hace tremendamente entretenido. Pasando los 3:30 la guitarra queda en soledad marcando el riff de la estrofa hasta que explota todo con la vuelta de la banda completa y es una idea estupenda, que cuando lo escuchen y empiecen a saltar y rebotar contra las paredes van a entender de lo que estoy hablando. ¡El final es excelente! Varias veces lo reproduje mientras escribía estas simples palabras. ¡Temazo!

A continuación aparece en la lista de temas, “Doomtrooper” que es la composición más larga del disco, casi diez minutos, en lo que es también el tema más espeso del disco. Con pasajes cercanos al Doom, con ese sonido bien mugriento que es característico de la banda, va transcurriendo el tema que a pesar de su duración, nunca se hace pesado de escuchar. El final llega con “Hades Unleashed”, que tras una linda intro, con la guitarra dibujando unos buenos pasajes, llega el acabose. La violencia del comienzo del disco se hace presente pero esta vez para cerrar esta magnífica obra. Entre riffs frenéticos y arreglos en la vena del Death Metal va transcurriendo esta canción, que promediando el tema nos tira por la cabeza un corte con la guitarra haciendo magia que es una hermosura entre tanta barbarie. La furia continúa sin freno,  hasta que llega, irremediable el final. Un enorme disco de una banda no tan popular quizás, que deberían prestarle atención estimados lectores, porque les aseguro que no se van a arrepentir.

Luego de unos años publican el álbum “Evil Power” – 2010, que es hasta el día de hoy su último larga duración. Un  disco que sigue fiel a lo ya expuesto por el Minotauro. Poderoso de principio a fin, (sino no sería un disco de Lair Of The Mimotaur). “Let’s Kill These Motherfuckers”, “Riders Of Skullhammer”, (gran estribillo), “Evil Power”, “Hunt And Devour”, “The Violent Iron Age Of Man” los destacados de otra gran obra de la banda, que si bien mermó en la continuidad de editar discos, sigue en actividad. Espero personalmente que pronto haya noticias y nos tiren por la cabeza otra mugrienta abominación musical. Ya va siendo tiempo.

Y así compañeros de este viaje a través de la guarida del Minotauro, hemos llegado al final del recorrido de esta batalla sangrienta. Este derroche de sangre y palabras ha llegado al fin.

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