Marduk «Memento Mori» (Century Media Records,2023)

Dentro de unos días tendremos una nueva visita de los Blackers suecos al país. Esta vez será en el marco del «Memento Mori Latin América», con la excusa de la presentación de su trabajo número quince en su discografía. Han dejado un poco de lado el tema bélico para centrarse más en la muerte del ser humano desde otro ángulo; lo que no quita de que esto siga sonando como si fuera estar en medio de una guerra. Las descargas ultraviolentas de Marduk no pierden un ápice de la esencia de la banda. Fuego a discreción es lo que nos vuelven a dar. Vamos a eso…

Cinco años pasaron desde su anterior propuesta, Viktoria. Aunque fue un disco bastante aceptable, tal vez nos había dejado con ganas de más. Si bien podemos decir que como su nombre indica fue una victoria, esta no fue por knok out, sino más bien por puntos. Tras cinco años de entrenamiento Morgan y sus muchachos vuelven a dar pelea, y esta vez quieren llevarse el título. Suena la campana (del ride) y se desata la hecatombe. Blast beats y bases de doble bombo hacen volar todo por los aires. El polvo de muerte se respira y nos hace escupir los pulmones salpicando sangre. «Memento Mori» suena asesino y prolijo. La voz Mortuus intimida desparramando agresividad, la cual llega a límites desgarradores en «Heart of the Funeral», haciéndome pensar otra vez en el escupir sangre, ahora graficado por el sonido lacerante de sus cuerdas vocales.

Las paladas de tierra cubren el cuerpo en «Blood of the Funeral», en un clima nauseabundo que hace sonar a las guitarras como moscas que vuelan y se alimentan de la descomposición. Un tema cargado de ultraviolencia sin ningún respiro, sin espacio de pensamiento, sin nada que puedas llegar a razonar. Una caída libre donde solo sabes que vas a morir en un instante, aunque ese instante dure cinco minutos. Marduk nos sigue mostrando que es una de las bandas más agresivas del género, pero también guarda algunos espacios para matizar esto con momentos más calmos (aunque desesperantes), como en «Shovel Beats Sceptre» o en la pieza que cierra el trabajo «As We Are». Momentos como estos son necesarios para que la obra no termine volviéndose monótona, ya que algunas veces podemos confundir las piezas. No hace falta más que escuchar el inicio de «Charlatan» y «Coffin Carol» para corroborar la similitud que hay entre dos temas que inclusive suceden uno atrás del otro.

Igual separador de monotonía puede ser el bajo, que logra entretener nuestros oídos a lo largo de la placa. Supongo que el hecho de que este haya sido grabado por tres personas (Devo Andersson, también el ingeniero del disco. J. Lindholm, o el mismo Mortuus) termina sumando al resultado final. Inclusive este instrumento tiene momentos de apertura como en «Marching Bones». Obviamente con un sonido distorsionado acorde a la agresividad que Marduk maneja.»Year of the Maggot» y «Red Tree of Blood» siguen dando muestra de agresividad al extremo, la batería de Simon Schilling no da respiro, las guitarras de Morgan cortan el aire. Todo es caótico y filoso, todo suena al extremo, pero suena bien. Despegándose del sonido más Raw que podíamos percibir en otros discos de la agrupación. Marduk lo ha vuelto a hacer. No porque hayan perdido el rumbo en otras épocas, sino porque vuelven a recordarnos lo que Marduk significa. Obras clásicas como el «Panzer Division Marduk» pueden sentirse orgullosas de este nuevo heredero. No necesitan mostrar experimentación para retener la atención de sus fans, sólo necesitan hacer lo que sus fans quieren, y creo que «Memento Mori» no es ni más ni menos que eso.