“Y yo pensaba que era una hernia cervical lo que tenía…”
Mi nombre es John Singing Rock. Soy un médico brujo nativo americano y escribo estas memorias para que quede un registro en caso de perder la vida. Hace un par de días se presentó en mi tierra un hombre blanco de nombre Harry Erskine, un psíquico y tarotista, solicitando mi ayuda después de visitar a otros cinco brujos. Una amiga de Harry está atravesando un serio problema de posesión por un antiguo espíritu indio. Los hechos que me detallo sobre como Karen, la amiga de Harry, comenzó a manifestar este problema me hacen dudar de nuestro éxito ante esta batalla.
La manifestación en el cuerpo de Karen empezó hace unos días como una protuberancia en la base de su cuello. Ella se dirigió al hospital Las hermanas de Jerusalén en San Francisco y allí los doctores Hughes y MacEvoy determinaron al principio como diagnóstico un tumor maligno, pero con el transcurso de los pocos días creció rápidamente y la conclusión fue otra. El supuesto tumor resulto ser un ente que se desarrolla en su nuca.
Al principio Karen visito a Harry en busca de apoyo ante la incertidumbre de la cirugía que le iban a realizar. Harry me comento que la noche en que se quedó Karen, balbuceo entre sueños las palabras “panawitchy salatoo” que significan “mi muerte presagiara mi regreso”. Durante la fallida intervención quirúrgica ocurrió uno de tantos sucesos que vienen presenciando, el Dr. Hughes produjo un corte sobre su mano sin poder proseguir mientras Karen decía las palabras “panawitchy salatoo”.
Otro extraño acontecimiento, esta vez lo vio Harry. Cuando en una de sus visitas a su departamento fue a que le tiraran las cartas la Sra. Herz. Ella empezó a recitar las mismas palabras “panawitchy salatoo” y Harry asustado vio como levitaba por el pasillo la señora para arrojarse y morir por las escaleras.
Sin tener respuestas Harry decidió visitar a su maestra en el tarot Amelia quien le recomendó hacer una sesión espiritista en la casa de Karen. Según lo comentado al iniciar la sesión e invocar al espíritu, allí se encontraban Harry, Amelia, su esposo MacArthur y la tía de Karen, se manifestó una imagen de un tótem nativo americano. El poder del espíritu invocado dejo su huella destruyendo parte de la casa.
Ahora me encuentro en el hospital y lo que avecina es muy poderoso. Nos enfrentamos ante el Manitou de un médico brujo de hace 400 años en su quinta reencarnación. Cada cosa en esta tierra, cada ser en este mundo posee su propio Manitou, su propio espíritu.
Cuando llegué lo primero que hice fue hacer un círculo protector alrededor de la cama de Karen para contener al espíritu y poder hacerlo retroceder en nuestro enfrentamiento. Nadie debe romper el círculo sino el Manitou arrasara con nosotros. Al invocarlo para saber con quién me enfrento es cuando mis dudas aun crecen más de nuestro éxito. El espíritu se manifiesta diciéndome su nombre, lo poderoso que es y que su medicina es mucho más fuerte que la mía. En vida fue Misquamacus, mi temor es aún más grande al saberlo. “Es el brujo más poderoso de todos los tiempos, transforma ríos, hace tormentas. Las montañas se elevan a su mando. Ningún espíritu o demonio lo ignora”. No sé si sobreviremos, ni Karen cuando salga el medico brujo…
The Manitou (¿¿¿Retorno de la quinta dimensión???) es una película de terror norteamericana del año 1978. Esta encasillada dentro de las películas con temáticas de exorcismo/posesiones y tiene una duración de 1 hora 44 minutos. Fue dirigida por William Girdler, director estadounidense que falleció a sus 30 años en un accidente de helicóptero. En un corto lapso de tiempo como cineasta dirigió 9 películas de las cuales menciono algunas como: Asylum of satan (1972), Abby (1974), Grizzly (1976) o Project Kill (1976 con la participación de Leslie Nielsen y distribuida por Troma entertainment).
Esta película basa su historia en la novela de Graham Masterton acerca de la leyenda Indio Americana sobre el espíritu del Manitou del año 1976.
La música estuvo a cargo del Argentino Lalo Schifrin conocido compositor y director de orquesta que realizo temas de series como Misión Imposible, Starsky y Hutch o Mannix todas de mediados de los 60 principios de los 70.
La recepción de la película tuvo ciertos matices malos por “la crítica”. Primero por ser una década donde empezaron a abundar largometrajes relacionados con posesiones y exorcismos gracias al gran éxito de El exorcista. William Girdler meses después del estreno de El exorcista saco Abby (1974) que es un caso sobre la posesión de una mujer negra por un espíritu sexual africano. Ya con The Manitou el director busco la misma veta, pero esta vez con algo más autóctono de su país; una posesión por un espíritu nativo americano.
En cuanto a los efectos especiales. Nos encontramos con la protuberancia del cuello de Karen (Susan Strasberg) que vemos como su desarrollo durante el crecimiento se transforma en algo desagradable, con esto quiero decir que cumple su función al transmitirlo visualmente. ¡¡¡Quienes hayan visto la película y no se tocaron la nuca posteriormente mmmm…!!!
No es una película donde el recurso sangriento sea protagonista salvo en una escena puntual y un poco de gore cuando se ve la cabeza decapitada de una enfermera. Lo que, si se utilizó y de manera notoria, también se puede tomar como un mensaje, es el uso de las nuevas tecnologías de la época contra algo intangible como la magia. Esto se ve en el desenlace de la película y por supuesto en sus efectos.
Para destacar la escena de la sesión espiritista (el zogaca me lo pegue yo) y la manifestación de Misquamacus (Felix Silla- Joe Gieb ambos lo protagonizaron) saliendo del cuerpo de Karen y arrastrándose.
Finalizando: lo bueno de volver a ver películas y escribir sobre ellas después de muchos años y como sigo remarcando. Es vivir esa misma sensación pasada que antes de verla, recordas la primera vez que te sumergiste en ella. The Manitou no es la gran película, pero para mí es de culto como todas. Tómense su tiempo y vuelvan a disfrutar.
Patricio “Panzer” Quelle
04/09/2020
*Las imágenes y la película fueron sacadas del blog Viaje a lo inesperado (recomendado)