Está claro que en Inglaterra, las reglas del fútbol se originaron ya en 1863, cuando el fútbol y el rugby divergían. Sin embargo, hay diferentes relatos de dónde empiezan a «patear» la pelota.

Por ejemplo, los griegos se les considera los padres del deporte y ejercicio físico. En el 2000 A.C se comenzó a practicar el Episkyros y lo curioso es que lo podían jugar las mujeres a diferencia de otros deportes. Para ganar se debía llevar la pelota al terreno del equipo rival y sobrepasar una línea, parecido a lo que hoy conocemos como rugby. Lo que no está claro es que partes del cuerpo se podían usar para transportar el balón.

Por otro lado los Guaraníes tienen sus raíces futboleras, según una investigación del sacerdote español Bartomeu Meliá dice que existe un registro del balompié en el diccionario de la lengua guaraní en 1639. Los indígenas de San Ignacio Guazú utilizaban una pelota la cual debían mantener en el aire utilizando los pies. La intención era que no cayera al piso pero no existían arcos o algo parecido para marcar un gol. La importancia del registro es que algunos se atreven a decir que los ingleses vieron este juego, lo copiaron y a partir de ahí empezó a formarse el ‘football’ que nació 200 años después.

Más de 1.000 campos de juego se han encontrado en territorio mesoamericano. Algunos datan del año 1.400 A.C y generalmente es un terreno largo y estrecho. Existen diferentes versiones o variaciones sobre este antiguo juego. El más común dice que había un círculo hecho de piedra en lo alto, llamado marcador, y se debía golpear con la pesada pelota para ganar.

No se podían usar las manos al igual que otra de las modalidades donde la intención era simplemente mantener la pelota en el aire y no dejarla caer. Se supone que esto también era un ritual y representaba diversas cosas como la guerra. Otros han asegurado que los integrantes del equipo perdedor debían morir.

En China según un manual de ejercicios militares en el Siglo III A.C en China se jugaba el “Ts’uh Kúh”, más adelante conocido como “Cuju”. El balón tenía un diámetro de entre 30 – 40 centímetros, estaba relleno de plumas y pelos y recubierto de cuero. La portería se formaba con palos de bambú aunque no había un arquero como tal. Los jugadores usaban los pies, pecho, espalda y hombros para controlar el balón y eludir a sus rivales. Pronto este juego dejó de ser exclusivo para los militares y lo practicó gran parte de la sociedad. Con el tiempo, y por diferentes motivos sociales, desapareció.

Algunas versiones dicen que el “Cuju” chino se introdujo en territorio japonés. Así fue como nació el Kemari en el 600 D.C. La pelota era más pequeña y fabricada con cuero de ciervo rellena de aserrín. A los jugadores se les denominaba “mariashi” y podían ser entre 6 y 12 por equipo. El objetivo de este juego era otro, pues la intención era pasarse el balón con el pie sin dejarlo caer al piso.

En Roma encontramos lo más parecido con el fútbol era la cancha porque estaba delimitada claramente y la dividía una línea central. El “Harpastum” era practicado por los militares en los años 700 y 800 D.C. La pelota debía llevarse a campo contrario aunque se podía usar cualquier parte del cuerpo y el juego era muy violento. Se le relaciona más con los orígenes del Rugby.

Y claro, por Último y más importante para esta sección vamos al deporte mas parecido que practicaban los Vikingos, si bien no existe mucha información algo podemos contarles…

Knattleikr

Knattleikr (del nórdico antiguo: juego de pelota) era un juego de pelota muy popular durante la era Vikinga en Islandia fundamentalmente. No se conocen exactamente las reglas de juego, pero en las sagas nórdicas se pueden extraer algunos datos:

La pelota redonda (rundbold en danés, brännboll en sueco, brennball en alemán y slåball en noruego) recuerda un poco al béisbol, al consistir en batear una bola y hacer un recorrido alrededor de unas bases.

Se jugaba entre equipos. Usaban una pelota dura que se golpeaba con un palo.

Los jugadores podían usar las manos. Era un juego de contacto cuerpo a cuerpo, se usaba la fuerza para obtener la pelota y el jugador más fuerte tenía muchas más posibilidades de ganar. Los torneos eran un gran espectáculo y se organizaban encuentros de equipos procedentes de toda Islandia. Era lícita la intimidación verbal, la guerra dialéctica jugaba un papel importante según las sagas. Era un juego muy recio que podía durar desde la mañana hasta el anochecer. Había la figura de un capitán de equipo. Existía una norma de penalizaciones. Aunque son conjeturas, es posible que habitualmente se jugase sobre una superficie helada, a veces irregular y algunas fuentes mencionan mar abierto (en nórdico antiguo, svell). No parece que usaran patines, por lo que es posible que preparasen calzado adecuado con suela de alquitrán y arena para facilitar la tracción sobre hielo.

En círculos recreacionistas históricos se juega un tipo de knattleikr entre entusiastas de la cultura nórdica, así como en los campus universitarios, a destacar como relevantes los equipos de la Universidad de Brandeis, Universidad de Clark, Providence College y la Universidad de Yale. La primera liga de competición anual se celebró en Nueva Inglaterra en abril de 2007, entre las universidades de Clark y Brandeis. El grupo reconstruccionista y organizador de Nueva Inglaterra advirtió que es un deporte agresivo y puede llegar a ser peligroso, como se menciona en el Grágás (antigua ley islandesa medieval), y un jugador tiene derecho a abandonar el campo de juego en cualquier momento.