Amigas! Amigos! Bienvenidos una vez más a esta agradable sección donde trataré de describir las distintas sensaciones causadas en mi persona por las diversas agrupaciones que han sabido llegar a mi corazón metálico con su música, en este emprendimiento palabrero que hemos bautizado Escrito Sagrado.
Los invitados de hoy, Paleface Swiss.
No soy un ferviente seguidor del Death Core, pero siempre estoy dispuesto igualmente a escuchar alguna banda que me recomiendan o que tal vez, descubro surfeando las bellas olas de Metal en internet. Y así que como mi gran amiguito, (digo amiguito por su diminuto tamaño, bajo como escala salarial, así de chiquitito), que con su vocecita (digo vocecita porque suena como las ardillitas de Albín, finito y agudo, pero intensa), me dijo que le pegara una oída a Paleface Swiss, que estaba buena. Y ahí fui a buscar y encontrarme con lo que voy a relatar a continuación.
Oriundos de la tranquila Suiza, nos traen una propuesta que la verdad, me sorprendió mucho. Para bien, por supuesto. Formados en 2017, fueron afianzando su estilo, editando sendos EP’s, “Chapter 1: From The Gallows” – 2018, “Chapter 2: Witch King” – 2019, donde dejaban bien claro que lo de los rostros pálidos no era fácil de digerir. Y llega el álbum debut, “Chapter 3: The Last Selection” – 2020, y ahí terminamos de confirmar que Paleface sabía bien donde iba. La sirena con la que nos recibe “Inevitable” nos pone de manifiesto que se viene algo bien jodido y pesado. Con voces que van desde el grito desgarrador hasta al chillido de un chancho en el matadero, el disco va avanzando, dejando lugar a algún que otro blast que aparece por ahí. Buen primer disco. “Inevitable”, “Lights Out”, “Go To Sleep”, “I”, “The Rats”, (Mi favorito de este disco), los elegidos de esta primer entrega.
“Fear & Dagger” – 2022, es el siguiente paso que comienza con una inquietante Intro que te pone los pelos de punta (a ustedes, claro, porque los míos ya volaron hace rato) y pedimos que por favor deje de decir “Pain! Pain!”. Madre mía, que comienzo de disco. Mitad del segundo tema y ya estoy exhausto! Enojados. Deprimidos. Desesperanzados. Angustiados. Todo eso a los gritos y con una música bien, pero bien pesada, eh. Marc Zellweger en voz, con ese particular estilo que nos comparte cada vez que inhala antes de gritarnos en nuestra p**a cara las jodidas letras que los rostros pálidos suizos tienen para compartirnos. Tommy Lee en bajo, (no confundir con un glamoroso baterista de una banda más buena fuera del escenario que en el estudio creando música), Yannick Lehmann, guitarra y Cassiano Toma, batería, son los responsables de esta muy buena obra de Death Core.
“666”, es la asfixiante Intro a la que le sigue “Pain”, (un temazo), “Suppressing Times”, (uno de mis favoritos, que cuando el bueno de “Zelli” grita “Bring It” buscamos algo para llevarle como si nos hubiese gritado a nosotros!), “Make a Deal With The Devil”, otro bombazo. Y acá hago un alto, porque leí por ahí que hay algunos que lo emparentan con Slipknot, y la verdad, hay que ser rompe huevos, eh! Puede haber una similitud en algunos gritos de Zellweger, pero nada más. Paleface Swiss tiene tanto de Slpiknot como yo de Matt Damon. “ Deathtouch”, “Dead Man’s Diary”, “Chaos Theory”, (ese comienzo, madre miaaaaa!), “The Orphan”, (ufffff! Ya no puedo más y todavía tengo que seguir escribiendo!).
Y acá hago un alto porque llega este momento raro, con un tema distinto, donde no tengo dudas en decir, y me la re contra banco, que el Señor Marc “Zelli” Zellweger nos da una clase magistral de cómo ir pasando climas. “My Grave/ Lay With Me” nos muestra todos los sentimientos habidos y por haber en 3:43 en una canción en la que calificó como mi preferida del disco, sin ningún tipo de dudas. Todos los sentimientos a flor de piel, luego de escucharla por vez mil. Una belleza. Escúchenla y después me cuentan.
“No Room Left In Hell”, “Fear & Dagger” son las canciones destacadas de este gran disco que a pesar de ir contra un gusto personal mío, (los discos que superan los cincuenta minutos me terminan cansado, restando parecer a mi percepción sobre el en el resultado final), este es un disco que recomiendo firmemente. OJO! Es difícil para escucharlo. No es una música amable. Pero si te gustan los ritmos bien pesados, y los voces que te gritan pero con un estilo bien personal y marcado, (y con muchísimo talento también, vale aclarar), Paleface Swiss es para vos.
Esto buenos muchachos nos tienen en ascuas porque ya anunciaron su próximo disco, “Cursed” – 2025, con salida el 2 de enero, y con cambio de integrantes también. Sale Cassiano, entra Collin “CJ” Hammond en batería. A fines de septiembre nos tiraron un adelanto para que vayamos degustando. “Hatred” fue el elegido y nos dice que todo sigue igual pero distinto. Sobra enojo, pero con mejor producción a mi entender. Y el pasado 7 de noviembre tiraron a la parrilla “My Blood On Your Hands”, cortito, poca letra, mucho enojo, furia, asfixia, en un tema que a pesar de sus menos de dos minutos tiene todo. Y queda bien claro que “Cursed” va a ser otro gran disco, al que estoy esperando con los brazos abiertos. Paleface Swiss llego a mi vida para quedarse, parece ser.
Hacía rato que una banda no me hacía sentir lo que estos muchachos con su música. Y son de Suiza. Uno de los países con mejor estándar de vida. Y así y todo derrocha furia, enojo, desencanto por todas partes. Imagínense si fuesen de Ciudad Oculta, o Fuerte Apache. Serian una trituradora de carne! (o harían cumbia….maldita sea!). Gracias Manuel por el dato, me hiciste conocer una gran banda, contra todo previo pronostico personal. ¡Aguante!
Hasta acá llegamos compañeros de asfixiante viaje, estas palabras hechas escrito han llegado a su fin. Pueden dejar comentarios y sugerencias en las redes sociales del portal, sea en la publicación o historia. Nos leemos en la próxima salida. ¿Dónde? Acá, por supuesto! ¡En los Escritos Sagrados de Yunque!