El viejo Paul sigue vigente, y a pesar de los continuos problemas de salud que lo han aquejado en estos años (llegado incluso a considerar la opción de retirarse por completo de la música), se niega a salir de la escena, se mudó a Croacia y desde allí trata de continuar con tu carrera y su vida como las circunstancias lo dejan.
Así que el pasado 17 de julio del corriente año, el otrora vocalista de la doncella, nos trae su último trabajo de estudio, que fue lanzado a través del sello Brave WORDS Récords.
Abre el Lp el tema homonimo a la placa, con una intro de un equino cabalgando para dar lugar a un tema compacto, de buenos arreglos de viola, logrando tremendas bases, que le va muy bien al registro arenoso del buen Paul.
“Get Get Ready”, va un poco a la saga con la canción anterior, pero manteniendo la línea bien pesada del tema anterior, quizá con otra cadencia para no ser reiterativa.
Luego viene “Stop The War” (el otro video clip), tiene un aire a Maiden en esas violas y donde vemos a un Paul saliendo un poco de lo agresivo de la voz, armonizando un poco más a pesar de sus ya conocidas limitaciones, pero le pone onda y eso suma.
Tenemos pistas como “The Doubt Within“, que quizá no va tanto a la saga con el cantante, debido a que se esmera por llegar a registros que no podría nunca o estilos que no lo favorecen, y esto lamentablemente, queda en evidencia.
“Here Comes The Nigth”, que a su vez es uno de los sencillos de difusión del disco, con su correspondiente video clip, y es lo que el titulo mismo dice, un corcel de heavy metal puro, con melodías agresivas, bases sólidas y la voz ríspida del buen Paul como protagonista.
La canción “Tequila” es un casi instrumental, donde solo se escuchan coros como parte vocal, por otro lado, la agradable sorpresa que es “Forever Bound” un tema que nos transporta inevitablemente a “Remember Tomorrow” de su primigenia banda, tanto por la intro lenta, como por la descarga de la última mitad del tema.
Tenemos un poco de Grunge en la cancion “Precious” que para mí, es uno de los puntos flojos del disco, a pesar de lo jugado del cantante en experimentar en un estilo un poco más alternativo.
Este retorno a las pistas, luego de casi una década cierra con el tema “Going Home”, donde el voluminoso cantante se mete en la veta que mejor le cuaja, o sea, la voz áspera, arenosa y agresiva, siendo una de las perlitas de la placa
Hay que mencionar lo acertado de rodearse de talentosos músicos croatas ni bien decidió afincarse en ese país, y ellos son Hrvoje Madiraca y Ante Pupačić Pupi,, que han tenido bastante que ver en el último tramo de la carrera de Paul.
Sin dudas, un buen regreso de este muchacho que a pesar de estar signado por infinidad de problemas, trata de no rendirse y seguir en lo que mejor sabe hacer. No va para disco del año, pero cumple.