Esperábamos con ansia el lanzamiento del nuevo material de la banda liderada por el buen Matt Sinner, sabiendo por todos los problemas de salud que viene atravesando desde hace por lo menos dos años, donde él mismo habría declarado a los medios “haberse pasado casi un año, de hospital en hospital…”, lo bueno es tenerlo nuevamente en carrera y haciendo lo que mejor sabe, buenos álbumes, con sus distintos proyectos musicales.
Así que, el 01 de septiembre del corriente año, la banda que lidera junto al tremendo Ralph Scheepers y al violero Tom Naumann, nos trae su último trabajo de estudio producido por el propio Sinner, coproducido por Naumann y Scheepers, siendo mezclado y masterizado por el histórico productor Jacob Hansen en su estudio ubicado en Dinamarca.
El arte de tapa corrió por cuenta de Stan W Decker, conocido por trabajar también con los coterráneos Rage y un numeroso catálogo de bandas.
Ya sumergiéndonos de lleno en la placa, abre la cuestión la pista “Another Hero” (el sencillo de difusión de la placa, con su correspondiente video), con una Intro un tanto a lo Kamelot y un Ralph con un timbre de voz a lo Mark Tornillo, dándole un tinte “Blood Of Nations” de sus coterráneos Accept, hasta que en el estribillo el pleno registro del poderoso vocalista sale a la luz, como era de esperar, violas machacantes, solos muy bien elaborados y una correcta elección para abrir el disco y me atrevería a decir, un show sobre las tablas también.
La siguiente pista “Bring The Noise”, ya se sumerge bien de lleno en la veta Primal Fear, con la voz un poco más al frente en el pleno registro de Ralph, pero sin irse a las nubes con sus agudos, cambios de ritmo notables y melodías gancheras, fórmula infalible.
En “Deep In The Nigth”, la cosa se pone bien marchosa, notamos que la voz del portentoso cantante tiene un tratamiento distinto, como bajando un tono, sin dejar de alcanzar esos monstruosos agudos cuando se lo propone obvio, quizá es lo que al tema le hace falta, para que se complemente bien con la cadencia del mismo. Este creo que sería otro tema ideal para el escenario y hasta aquí es un disco compacto.
La canción “Cancel Culture “, (el otro corte de difusión) viene a traernos el Primal Fear que quizá todos estaban esperando, velocidad, potencia, buen sonido, cambios de ritmos notables, hacen de la pista una joyita, ya casi llegando a la mitad de la placa.
Luego de la mitad del disco, tenemos una perlita cuasi épica, que se titula “Their Gods Have Failded”, una canción bastante sentimental y emotiva, que la hace también una de las más atractivas del presente trabajo.
A continuación, la canción “Steelmelter” tiene de nuevo esa porción del Accept post Udo, en cuanto a sonido y trabajo vocal, pero sin embargo es de las pistas del disco que logra su cometido a base de buen sonido y poder.
Por supuesto que hay lugar para la parte baladezca y corre por cuenta de “Forever”, donde Ralf saca a relucir una modulación de voz soberbia, el tema descolla con arreglos de voces increíbles y un trabajo de violas un poco más al frente, con melodías y vibratos más que excelsos.
El cierre está a cargo de “Fearless”, convirtiéndose en la canción más Primal Fear del disco, dando un notable cierre a una producción de excelente factura en todo sentido, la banda ha tomado prestado algunos ingrediente del sonido más actual para agiornarlo a la composición e la placa, lo que ha devenido como dije anteriormente en un material final de factura excelente, quizá un poco más alejado de aquel Primal Fear de antaño que nos voló la cabeza, pero bueno, el mundo sigue dando vueltas y por suerte estos muchachos estarán por acá el próximo 31 de octubre, solo espero poder ser de la partida ese día como lo fui en el 2009 y 2016.