Para Debbie Klein de parte de David Kessler
Hola Debbie, te parecerá extraño que escriba esta carta y más cuando a pesar de conocernos desde hace varios años no mantenemos una relación estrecha de amistad. ¿Qué me impulso a hacerlo? También es raro, será por todo lo que hemos vivido con Jack y ahora estoy atravesando.
Nuestro viaje por Europa comenzó en Inglaterra para después ir a Italia. Al viajar haciendo dedo abaratamos nuestro presupuesto y nos divertimos bastante. Inglaterra es un país muy húmedo al menos por donde nos levantó un granjero con su camioneta llena de ovejas, nuestras compañeras; a Jack una de ellas le defeco la mochila.

Siendo el atardecer el amable granjero nos dejó en la intersección de los pueblos Leshire, Erwood y East Proctor, a este último nos dirigimos caminando y viendo la campiña a nuestro alrededor. Antes de despedirnos nos advirtió que no nos adentremos en los páramos.
Ya estaba anocheciendo cuando llegamos a East Proctor. Es un pueblo chico de granjeros con pocas casas y decidimos ver si podíamos comer algo. Vimos lo que parece ser un bar con un nombre y cartel particular “el cordero degollado” así que entramos. Todos en el bar se callaron y nos veían de manera sospechosa, es un lugar pequeño con parroquianos bebiendo cerveza, jugando a los dardos y ajedrez. Notamos en la pared una especie de altar con dos velas y un pentagrama. Eso llamo la atención de Jack y me explico algo de hombres lobos de una película de Lon Chaney Jr. El ambiente había vuelto a la normalidad y uno de los concurrentes contaba un chiste hasta que Jack pregunto sobre el pentagrama. En ese instante volvieron a callarse y prácticamente nos echaron, pero antes advirtiéndonos que caminemos por la carretera, no entremos en lo paramos y nos cuidemos de la luna.


Salimos con Jack por el sendero y al haber luna llena, iluminaba un poco la escaza visibilidad que teníamos. Sin darnos cuenta y con ese sentimiento extraño de lo que paso en el bar nos desviamos hacia los páramos cuando comenzó a llover. Escuchamos un aullido y decidimos volver al “cordero degollado” pero estábamos perdidos. Un gruñido que era cada vez más cercano nos rodeaba, al correr ambos escapando me tropecé y caí al suelo. Ahí sucedió todo porque vi como a Jack lo ataco una bestia. Sali corriendo asustado, pero volví por los gritos de auxilio de Jack. Al encontrarme con él lo vi, estaba muerto, desgarrado todo ensangrentado y la bestia me ataco lastimándome. Escuche unos disparos y me desmaye.


Lo siguiente que te cuento Debbie paso tres semanas después en Londres y es donde estoy aún. Siento que esta carta es más por la necesidad de recordar a mi amigo que tanto le gustabas y no por lo que estoy viviendo que es una locura.
Mientras estuve en el hospital y se curaban mis heridas me dijeron que a Jack lo mato un hombre, un lunático que se había escapado de un manicomio cuestión que no era cierta y que en reiteradas oportunidades se lo repetí al Dr. Hirsch, a los inspectores y a Alex mi enfermera. Lo que nos atacó, aunque parezca una locura y suene irracional fue un hombre lobo. ¿Como lo sé? En el hospital empecé a tener pesadillas, me vi desnudo cazando ciervos, vi a mi familia muerta por una especie de monstruos uniformados y yo degollado. La peor parte es que comencé a ver y charlar con Jack. Jack como muerto viviente. El me explico esta locura del ataque de un hombre lobo y porque puedo verlo a él, es una maldición que solo se rompe si el último hombre lobo muere y ese soy yo. Me sugirió que me mate porque en la próxima luna llena que es hoy voy a transformarme y asesinar personas.

No sé qué pasara Debbie después de esta noche o si me estoy volviendo loco, pero algo no está bien. Intentare seguir con esta carta mañana.
An american werewolf in London (un hombre lobo americano en Londres) es una película británica estadounidense de terror/comedia del año 1981 con una duración de 1 hora 37 minutos que contó con un presupuesto de 10 millones de dólares.
Fue dirigida por John Landis, director, actor, guionista y productor norteamericano que se caracteriza por hacer comedias. Entre sus obras como director tenemos: The Blues brothers 1980 y 2000, Twilight zone (la película), Oscar, Superdetective en Hollywood III, Burke y Hare entre otras. También ha dirigido videos musicales para Paul McCartney, B.B. King o Michael Jackson. Para escribir el guion, John Landis se baso en una experiencia de características esotéricas similares durante un viaje que realizo de joven.
Esta película se destacó por el trabajo de maquillaje hecho por Rick Baker. La academia de artes cinematográficas, gracias a esta impresionante labor sobre los personajes, creo el premio Oscar al mejor maquillaje; premio que se lo llevo Rick Baker. Actualmente sigue vigente esta categoría.


Rick Baker se retiró, pero además de tener el récord de Oscar al mejor maquillaje, 7 Oscar, podemos apreciar su trabajo de efectos especiales y maquillaje en muchas películas. Algunas de ellas son: King Kong 1976, Videodrome 1983, Harry y los Hendersons 1987, Gorilas en la niebla 1988, Ed Wood 1994, Escape de Los ángeles 1996, Maléfica 2014 entre tantas donde cumplió y se destacó.
Otro punto que destaco son los temas que eligieron para ambientarla. La música de rock and roll de las décadas del 50 y 60 tiene algo muy particular que va de la mano con el terror. En esta oportunidad el tema que abre Un hombre lobo americano en Londres es Blue Moon interpretada por Bobby Vinton. Esta misma canción aparece en dos oportunidades más, durante la transformación de David en una versión de Sam Cooke y en los títulos finales interpretada por The Marcels. También incluyeron Moondance de Van Morrison mientras Alex y David hacen el amor y Bad moon rising de Credence Clearwater revival en el momento anterior a la transformación. Blue moon resuena aun en mi cabeza y es perfecta.
Al verla de nuevo y ya siendo mayor recordaba el miedo que me genero cuando la vi por primera vez de pequeño. Una sensación que me agrado saber cómo llego en su momento por sus grotescos efectos especiales, la sangre y descomposición de Jack y un hombre lobo que arrasaba con todas las personas en su camino. Dense un tiempo y vuelvan a disfrutarla.