Atrocity es una banda proveniente de Alemania, que se encuentra activa desde finales de los 80s. A la fecha llevan editados una docena de álbumes y varios Eps. Su propuesta extrema es bastante difícil de clasificar, ya que se han trepado a cuanta tendencia de época apareciese. Esto es algo que para muchas personas puede ser entretenido o vanguardista pero que, a mí en esta ocasión en particular, sólo me generaba alejamiento. Y yo no soy quién para juzgar o criticar, no se trata de eso, es simplemente que no me llegaban. De hecho, otras bandas que experimentaban o incorporaban nuevas tendencias, como Paradise Lost, siempre me gustaron. Pero algo en el sonido de Atrocity no me permitió digerirlos en sus distintas facetas, y con el tiempo mi interés en ellos se fue transformando en nulo. Así es que prácticamente esta nueva producción me toma por sorpresa. No es que no haya escuchado nada de ellos desde su disco de covers de 1997, pero digamos que, de ahí en más, me entraban por un oído y me salían por el otro. Apenas les presté un poco de atención con sus dos anteriores producciones, que conforman una trilogía de álbumes con el que hoy nos ocupa…Y si ahora me encuentro reseñándolos por este medio, es porque volví a prestarles atención. El hecho es simple: Este disco me gustó.
Esta tercera entrega de los Okkult arranca con una Introducción tribal infanto-diabólica que se transforma en «Desecration of God», para el cual filmaron un video que está muy bien producido. Una canción llena de buenos riffs, baterías a doble bombo y estribillos pegadizos en un contexto de Death Metal con detalles modernos, y pequeñas orquestaciones que podrían acercarse al Black Melódico.
«Fire Ignites» continúa por el camino asesino del Death Metal, con bastante blast y bases de guitarras sencillas pero efectivas, donde los solos son apenas un detalle. Otros temas como «Born to Kill» (que cuenta con un video de corte steampunk post apocalíptico), o «Priest of Plague» presentan matices más groove con bastante gancho, aunque no se despegan del concepto general del trabajo. Mientras que en otras como «Bleeding for Blasphemy» podemos encontrar detalles de Heavy Metal clásico entre la oscuridad de la muerte. Siempre notaremos pesadez atmosférica y un sonido totalmente nítido que puede tornarse más directo, o más teatral, como en «Malicious Sukkubus», para la cual agregaron las voces de Elina Siirala (Leaves’ Eyes) y Zoë Marie Federoff (Cradle of Filth) dándole más misticismo y la tenebrosidad típica del Black Metal de corte sinfónico. Luego de esto será el turno de molernos a martillazos con «Lycanthropia», y retomar el desparramo de riffs y baterías contundentes de Death Metal en «Faces from Beyond» (otro que también posee video oficial).
En «Cypka» vuelven un poco a las raíces con mucho doble bombo, dejando para el final «Teufelsmarsch» que contiene un poco de todo lo mostrado en estos cuarenta y cinco minutos.
Atrocity nos ha entregado la culminación de una trilogía que comenzó hace una década; y creo que la espera valió la pena. «Okkult III» es un trabajo lleno de progresiones maléficas, que no llegan a asustar, pero sirven para colorear el concepto del todo (inclusive para unificarlo con las dos entregas anteriores). La producción es excelente, suena nítida, pero a la vez agresiva. Y aunque de alguna manera esto le meta un poco de luz a la oscuridad, creo que termina sumando, más que restando, ya que nadie espera que Atrocity le quite el sueño por temor a las pesadillas.
Atrocity son: Alexander Krull (Voces, teclados y samples), Joris Nijenhuis (Batería y coros), Micki Richter (Guitarras), Andre Nasso (Bajo) y Luc Gebhardt (Guitarras).