Hernán Alzamora:
Si de algo les sirvió a los muchachos de V.I.D.A. haber ido a tocar al Festival Wacken en 2022 es para cosas como estas. Cargarse al hombro un festival de las características del Furia Metal Fest es cuanto menos digno de elogiar. El predio (Campo Social y Deportivo Municipal de Zarate, en Bs. As., Argentina) cuenta con lugar para dejar los vehículos, zona de acampe, y una extensa zona verde donde teníamos el sector bufet (con variedad de birras, fernet, etc., sanguches varios o empanadas a un módico precio), las carpas de merchandising, y dos escenarios dispuestos a poco más de cincuenta metros uno del otro. El más cercano al ingreso era el Escenario «Furia», siendo apenas más grande que el escenario «Caos». Podríamos tomarlo como el escenario principal, pero no porque tenga sobradas diferencias, más allá de algún decibel de más en el volumen, o porque haya sido donde se cerró cada noche, sino para tratar de graficarles las diferencias mínimas que, valga la redundancia, no marcaban mucha diferencia.
Viernes 10 de marzo (Marcelo Russo):
Con mucha expectativa desde muy temprano por la mañana comenzaba a preparar las cosas para llevar al Furia Metal Fest y les garantizo que se sentía en el aire que iba a ser el inicio de un fin de semana inolvidable.
Con la temperatura que promediaba los 39 grados de sensación térmica, emprendimos viaje con mi amigo Hernán hacia la ciudad de Zárate. Luego de 2 horas aproximadamente de viaje llegamos al Campo Social y Deportivo Municipal, Zárate, predio, donde todo se encontraba muy bien organizado, tanto como el sector de buffet, escenarios, prensa y la zona de acampe.
Aproximadamente a las 17:30 horas, subió a tocar al escenario «Caos» la banda Riel, oriundos de Santa fe que con su bandera bien en alto y apuntalados por el sol que todavía rajaba la tierra. Los muchachos de Riel ejecutaron un gran set de temas en la vena del Metal pesado y combativo, que provocó que los presentes nos acercáramos al escenario.
Luego era el turno de The Cuervo’s, que no dió respiro con su set list muy ajustado, que cada tema era una trompada en la cabeza que te machacaba a puro Hardcore Metal excelentemente ejecutado.
Alrededor de las 18:15 horas aparecía en escena Jabalí, desplegando todo su poderío metalero en un escenario que todavía se encontraba iluminado por el sol.
El público no dejaba de ingresar al predio y se podía ver que ya se gestaba un gran clima de fiesta metalera. A las 19 horas, sube al escenario «Furia», la banda Kobal, quienes también realizaron un set de temas muy poderoso, demostrando que son una gran banda de Metal.
Pasadas las 19:15 horas aproximadamente, aparecía Hueso en el escenario «Caos», una banda en la vena del Crossover con tintes de Thrash Metal y Death Metal, que supieron con su potencia captar la atención del público, quienes manifestaron un gran apoyo.
El sol se iba yendo lentamente y el atardecer se acentuaba cada vez más, creando un clima especial para que Amethyst, a partir de las 19:30 hs., sean los encargados de plantar la bandera del Doom Metal nacional en el Furia y sacudan al público con esas melodías que por momentos se tornaban bien densas y explosivas a la vez.
Si bien la diversidad de las bandas en cuanto a los estilos musicales era notorio, algo para destacar es que siempre el público fue muy respetuoso. Claramente el Furia Metal Fest es una fiesta del Heavy Metal nacional en todas sus variantes.
Luego de una buena dosis de Doom Metal y ya de noche, subió al escenario Steelbals que dio una cátedra de Heavy Speed Metal increíble. Desde de la ciudad de Campana hicieron sacudir las cabezas de muchos de los presentes.
A continuación, era el turno de Cernunnos que con una gran puesta en escena acompañados por el juego de luces que, comentario aparte, eran increíbles en ambos escenarios, la banda desarrolló un set de manera muy prolija y se podía apreciar una muy buena respuesta del público hacia esta gran banda de Folk Metal argentina.
Desde Uruguay, fueron muy bien recibidos los heavy metaleros ReyToro, que con su arte, levantaron más aún la buena vibra de la gente y dejaron bien en claro que en el país vecino hay heavy metal de calidad.
Todo transcurría perfectamente, las bandas que terminaban de tocar se dirigían al sector de prensa, que estaba muy bien organizado por la gente de Heresy Metal Media, con Leo Heresy a la cabeza.
Luego, era el turno de Jeriko, que sin dudas demostraron sobre el escenario «Caos», que son una gran banda de Metal y fueron los encargados de transmitir una energía increíble a sus seguidores, quienes respondieron coreando y agitando todo el tiempo junto a la banda.
La noche se iba tornando más extrema y si amigos y amigas, era el turno de Mastifal. Una aplanadora que pasó por encima de todos los que estábamos allí presentes. Algo para destacar también, el sonido en ambos escenarios era excelente, muy profesional y Mastifal hizo lo suyo de manera impecable, haciendo un repaso por su discografía.
Por último, luego de una breve espera, sale al escenario «Furia», para cerrar el primer día del festival, Plan 4. A la banda se la pudo ver muy sólida, demostrando una vez más que son una excelente banda de Metal. En un momento, Knario hasta cantó a capela mientras solucionaban un problema técnico.
Plan 4, desarrolló un set de temas perfectamente amalgamados y ejecutados, los riff bajaban del escenario como trompadas de Tyson. Sin dudas fue un excelente cierre de festival, donde constantemente se recordó al gran Gonzalo Espejo.
En relación al festival en general, pude ver que las personas se retiraban con una sonrisa en la cara, esto verdaderamente fue una fiesta! Creo que fue el inicio de un fin de semana excelente para el Heavy Metal nacional. Todo muy bien organizado por los muchachos de V.I.D.A., que se pusieron al hombro la organización del festival, que esperemos que continúe y vaya creciendo año a año, por el bien del metal nacional. Muchas gracias por dejarnos ser partícipe de este increíble Festival!
Sábado 11 de marzo (Hernán Alzamora):
Luego de un largo viaje pasando de tren en tren, pude llegar justo a tiempo para los primeros acordes de los oriundos de Campana, Bs. As., Violent Execution, quienes salían a comerse el escenario Furia con su Thrash Metal de pinceladas Crossover. Su sonido impecable, más las composiciones hechas a base de riffs pegadizos lograron retenerme al instante, sepultando la curiosidad por recorrer el lugar. A la distancia, entre tema y tema, se escuchaba que desde el otro escenario se hacía presente Innerforce. Banda que últimamente vengo siguiendo, así que no me sentí tan mal por quedarme un rato más viendo a Violent Execution. Se acercaba el final de su set y terminé cediendo para dirigirme al escenario Caos, donde los Powermetaleros le hacían frente a los últimos rayos de sol calcinante. Si tengo que buscar un detalle a cambiar en este evento sería justamente el de dejar que cada banda termine su set antes de que arranque la banda del otro escenario. Por lo general se pisaban unos 10 o 15 minutos, esto no te impedía ver el show de ambas, pero tampoco te dejaba ver sus sets enteros. A favor teníamos la sensación de agite constante y el entretenimiento que nunca cortaba. La gente se movía de un escenario al otro para ver un poco de cada banda, así daban lo suyo los venezolanos Piel de Lobo, que lograron entretener a los presentes con su propuesta que combina distintos tipos de Metal y ritmos afro.
Luego era el turno de Aversus, con su Metalcore Neuquino más que vehemente, mientras Necratal volvía a poner bien arriba el grito del Thrash en el escenario Furia. De a poco comenzaba a bajar la luz natural y aparecían los rayos desde los escenarios (visualmente genial). Malicious Culebra (ganadores en otra edición del Wacken Metal Battle Argentina) salían a gritar «Nunca más», y Grito Clandestino mixturaba el Heavy Argento de letras rockeronas, con detalles de guitarras estilo Annihilator.
El escenario Caos se llenaba de candelabros con velas, huesos y cráneos humanos, para colorear la oscura propuesta de Wolves Winter. Una de las bandas más extremas que pasaron por este festival, haciendo gala de un Black Metal de corte finés donde los músicos se presentan con túnicas y a cara tapada, generando un clima ritualístico que hipnotizó a todos los presentes. Desde el escenario Furia se movían las luces (y la gente) al golpe de NVLO; una banda de Deathcore que viene en constante ascenso y combina muy bien con la propuesta de Against, que también se encuentran en constante ascenso, y mostraban su poderío desde el otro escenario. Desde Uruguay, los Ritual de Nacimiento nos exponían su Melodeath, mientras el escenario Caos se preparaba para la fiesta de Bloodparade, con un audio muy nítido y una Brenda que cada vez canta mejor. El escenario Furia se llenaba de Heavy Metal con la prolijidad característica de Helker, y el escenario Caos daba su cierre con un show demoledor de Serpentor, que durante cuarenta minutos nos castigó a puro Thrash presentando temas de su última placa, Sacerdote del horror, y algunos viejos clásicos.
Llegaba el turno de los afitriones V.I.D.A. quienes, a pesar de estar de acá para allá con las cuestiones logísticas del evento, no acusaron señales de cansancio sobre las tablas del Furia, y pusieron la energía a la cual nos tienen acostumbrados. Combinando sonido, luces y un poderío escénico que fue captado hasta por drones que sobrevolaban el predio. Ojalá pronto podamos ver esas imágenes porque deben ser alucinantes. Es difícil calcular la cantidad de gente en este tipo de eventos, pero seguramente rondaba, o superaba los 1500 espectadores; los cuales tampoco mostraban signos de cansancio a la hora de recibir a los encargados de poner fin a la noche del sábado, Krisiun. Ya hemos visto en otras ocasiones a los tres hermanos brasileros, y sabemos a lo que nos exponemos. Un compendio de riffs asesinos, uno tras otro, contenidos por unas baterías técnicas y ultraveloces que no dan respiro. Death Metal a diestra y siniestra con el agregado de un cover de Motorhead (el clásico Ace of Spades) y un solo de batería donde a falta de blast… metío más blast… Un tremendo cierre que deja la vara alta para próximas ediciones del festival. Realmente bien organizado y a todo pulmón. Cuando uno pone pasión y entrega en lo que hace se nota, por eso no queda más que agradecer a los encargados del Furia Metal Fest por brindarnos un show como se debe, y a la gente de Heresy Metal Media por la invitación.