Grima – “Rotten Garden” (Naturmacht Productions, 2021)

Unos meses atrás aparecía este cuarto trabajo de los gemelos rusos del bosque, el cual estuve a punto de reseñar, pero la salida de álbumes que consideraba más importantes lo fueron encajonando. Decidí pegarle otra escuchada para definir si me ponía a escribir o lo botaba definitivamente, y como verán me decidí a reseñarlo porque, claramente, no era un disco para dejar pasar.

Este proyecto está liderado por Morbius (Guitarra) y su hermano Vilhelm (Guitarra y voz), pero suelen meter músicos de sesión en sus grabaciones para el resto de los instrumentos. Serpentum los acompaña en el bajo desde el 2017, y Vlad (baterista de Ultar) desde 2019. Juntos le dan forma a un black metal cargado de atmósfera, con temática pagana y un romanticismo extremo por la naturaleza; al punto que sus entidades han sido cubiertas por corteza de árbol.

Lo que distingue a Grima de otras bandas del sobrecargado género es la incorporación de algunos elementos (o instrumentos) folclóricos como el acordeón. Estos están puestos muy sutilmente, cumpliendo la función de adornar. En ningún momento rompen el esquema, ni interfieren con las capas y capas de ambiente frio y mohoso de su música.

“Cedar and owls” nos introduce en la vegetación nocturna. Una sensación de terror nos invade, la música golpea violentamente con desgarros vocales continuos. Esto comienza a hacerse ameno, descubrimos que detrás de todo eso hay armonías relajantes. Un solo de guitarra nos lleva a donde moran grandes búhos, y nos los describe con belleza. Podemos oírlos ulular entre hermosas melodías.

“Mourning Comes at Sunset” es un canto al frío atardecer. Blast de batería sobre colchones de guitarras distorsionadas y climáticos teclados se funden con las voces de principio a fin.

“At the Foot of the Red Mountains” parece mostrarnos los clichés del género, cuando deciden meter un acordeón que impregna de genialidad la pieza. La mixtura se da de forma natural creando distintas sensaciones que nos transportan a tiempos antiguos de su cultura.

El agua corre, el aire fresco se respira de manera agradable en el pasaje “Old Oak”, que pasa del piano al acordeón en el inicio del que le da título al álbum. Esta, la pieza más extensa, es melancólica, pero atesora momentos explosivos de black metal. Todos los instrumentos que aparecen durante el trabajo tendrán su pequeña participación aquí. 

“Grom” continúa mostrando la base de su todo. Tenemos ese black atmosférico presente, con capas desgarradoras y otras que van casi a lo sinfónico de manera sencilla y eficiente.

A modo de bonus track incluye “Devotion to Lord”, editado como single en 2020. Un poco más doom y con un audio que, si bien no se despega del todo, denota una leve diferencia en la producción.

Rotten Garden es un viaje a la profundidad del bosque, para amantes de lo oscuro o aventureros que no le temen al clima gélido. Musicalmente limpio a pesar de tener la crudeza necesaria para englobar lo que representa. Los instrumentos se funden en una base constante de clima apesadumbrado sin generar monotonía. El buen gusto por el detalle, junto a las distintas capas y matices (dentro de un mismo tono) terminarán mostrándote la luz en la oscuridad.