Hela – Las dos caras más caras

El hermoso bosque que proponen las barbas, esta vez me conducen sin sentido a un lugar que no sé dónde es, ni tampoco que es, lo único que sé es que camine incontable tiempo e incansables pasos que mucho han costado, como que camine casi 9 días, y un olor nauseabundo aparece de la nada al mismo tiempo que se divisa un hermoso lugar… la realidad no coincidía con el aroma, algo raro estaba por suceder, creo que estoy paseando por los bosques de Hela… 2 caminos, uno hermoso, otro horroroso, aunque ambos conducen al mismo lugar, tú eliges por cuál llegar, si es que así lo quieres…

Hela es la última hija de Loki con Angrboda y la hermana de Jermundgander, y Fenrir,

Su cuerpo estaba partido en dos, el lado derecho era de una belleza envidiable y el lado izquierdo era un cadáver podrido y aterrador que despedía un hedor asqueroso. Su apariencia asustó a los dioses (Odín en especial)  desde su nacimiento, por lo que decidieron encarcelarla en el inframundo más oscuro y profundo; designándola como el dios de la muerte.

Para llegar a Helheim, uno debe recorrer un camino largo y aterrador, que toma nueve días para cruzar, donde los moribundos son atados con cadenas irrompibles y convocados al inframundo por los sirvientes de Hel. Para entrar en el reino oscuro y envuelto en niebla, debes atravesar la Puerta de Hela, que está custodiada por gigantes, incluido Helmgrimir.

Su imperio y su residencia son grandes, sus palacios son altos y sus puertas son grandes. Aunque parezcan reales, todo está hecho de sombras. 

El tipo de muertos que eran enviados a Hela, consistía en enfermos terminales, que constituía la llamada “muerte del miedo”, pero llegaron otros, como Balder, que legó a Hela cuando Hodr lo mató, también todos los que murieron en tierra llegaban a Hela, excepto las mujeres y los que se ahogaron en el mar.

Hela trataba con amabilidad a los inocentes que entraban en sus dominios, les dio un lugar donde pudieran disfrutar de su felicidad, pero los vikingos temían a la idea de entrar en su territorio. Lo que hacían para no entrar en los dominios de Hela (Hell – Infierno) era hacer que los hombres y las mujeres se perforaron con lanzas, saltaran desde acantilados o exigieron ser quemados vivos; también venían mujeres que incluso saltaban desde rocas con lanzas que recibían en las bodas. Hicieron esto para tener el honor de ser incineradas por sus seres queridos, y como mujeres, como espíritus libres, pudieran volver a ver a sus maridos en los resplandecientes salones del Valhalla.

El castillo de Hela se llamaba Eliud, o “Miseria”, ese es su nombre, y se encuentra en medio de una larga hilera de barrotes construidos para que no pueda penetrar la luz.

En la puerta de Eliud, conocida como Falanda Forad, o “El Principio”, se encuentra una de las raíces de Yggdrasil, el fresno. Tiene una sala llamada Bilkanda o “Los Malditos”.

Su cama de descanso es Keur o “Sleepless”; la mesa donde come se llama Sult o “Sult”. Tiene tres sirvientas llamadas: Ganglate, Gangleura y Sultin, que significa: “Atraso, Pereza y Sed”.

Se dice que Hela emergerá de su reino oscuro y se convertirá en la líder de la horda inmortal que lucha contra el ejército de Odín.