Alice Cooper – “Road” (earMusic, 2023)

Setenta y cinco años, y el viejo Alice sigue en camino. Una buena manera de festejarlo es grabando un disco lleno de guiños a su historia, de una forma directa y potente como si fuese un show en vivo. A tal punto de que esta vez reunió a sus muchachos (y muchachas, ya que la tenemos de vuelta a la bella y carismática Nita Strauss) para encarar su vigésimo noveno trabajo como si la banda estuviese en gira. No sólo por la temática conceptual del álbum, sino también interactuando con ellos en las composiciones y la grabación del trabajo. Así es que, con la recién citada, más Ryan y Tommy en las guitarras, Glen a la batería y Chuck Garric al bajo, fue que dieron forma a “Road”, literalmente grabando juntos en directo. Varias veces ha pasado Alice Cooper por Darknessnews, pero a pesar de eso y del cambiazo de año, creo que no podíamos dejar afuera este viaje al estudio realizado en el 2023 junto al viejo compañero Bob Ezrin.

Todo comienza con la vibra setentosa de “I’m Alice”, donde más de un fanático notará los guiños que el bajo y las guitarras van tirando. Es evidente que se ha buscado adornar la historia con la historia misma. Es un buen punto a favor, ya que a lo largo del trabajo aparecerán guiños que se perciben adrede, pero se encuentran lejos de sentirse como auto-robos. El buen gusto y la trampita de des-relacionar el título de la canción con la música de la misma también se siente agradable. Por ejemplo “Welcome to the Show”, nos recordará a “Welcome to my Nightmare” desde el título, pero musicalmente logran despistarnos hasta llegar a otros destinos. Mismo caso que la canción que abre la placa. Sentimientos nostálgicos de la era dorada de Alice Cooper se transforman y mixturan con energías rockeras en “All Over the World”; una pieza cargada de detalles e instrumentaciones rimbombantes que bien podrían caberle a bandas como Aerosmith.

Pero la cosa recién arranca, y sigue mutando… Si bien todo lleva un hilo conductor, canciones como “Dead Don’t Dance” contienen guitarras altamente pesadas que pueden transportarnos a los 90s. Lo más raro es que quién se encuentra invitado en esta pieza es nada más ni nada menos que su viejo compañero Kane Roberts, el Rambo de la guitarra.

El Rock ‘n’ Roll sigue siendo el punto sobresaliente de la placa, canciones como “Go Away” (más tirado al lado Sleaze de Guns N’ Roses), “Big Boots”, “Road Rats Forever” (bien clasicones y con pianito incluido) o “Rules of the Road” se contraponen a otras piezas como “White Line Frankenstein”, la cual tiene una bibra del Alice Cooper más moderno con detalles de guitarras a cargo de Tom Morello (Rage Against The Machine), o la pesada “The Big Goodbye”.

La balada no podía faltar, así que Alice se pone algo melancólico en “Baby Please Don’t Go” y comienza a sentir el peso de andar de gira en “100 More Miles”, donde el clima se vuelve áspero y acompaña la transformación del personaje paranoico que Vincent Furnier supo corporizar hace tantos años. Sin dudas este es un valor agregado sobre el final del trabajo con tres minutos de arte puro, y ese toque de oscuridad único que el viejo fan sabrá valorar.

El paseo no termina del todo aquí, ya que han decidido agregar el cover de The Who, “Magic Bus” (con un lindo solo de batería de Glen Sobel) que calza perfecto con la temática del álbum, acercándolo a los cuarenta y ocho minutos de duración.  Alice Cooper sigue en la ruta disfrutando lo que sabe hacer sin preocuparse por el qué dirán, ni por atraer a nuevas generaciones. Es como si ya se hubiese cansado de torcer su propuesta para acercarse a los estándares de cada época que ha transitado. Hoy prende el motor para avanzar por donde se le da la gana, y sus ganas son de rockearla para siempre. Por eso, y por todo lo demás… gracias maestro!